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El boro es un micronutriente esencial para la planta de maíz. Desempeña un importante papel en varios procesos de las plantas, incluida la formación de la pared celular, la polinización, el desarrollo de las semillas y, lo que es más importante, durante la formación de panojas y estigmas. El boro también ayuda a las plantas de maíz a producir más azúcar, lo que las hace más dulces. Sin embargo, como el boro puede drenarse de la capa del suelo, particularmente en climas húmedos, puede haber una reducción en la absorción de plantas y el potencial de rendimiento. Si el boro no está disponible, las plantas producen polen que carece del almidón necesario para el desarrollo. Además, la deficiencia de boro puede resultar en mazorcas de maíz más pequeñas y atrofiadas, lo que genera problemas de fertilidad en la planta de maíz. Los análisis de suelos son necesarios para ayudar a los agricultores a determinar cuánto boro agregar a sus suelos. La textura del suelo y los requisitos de boro de la planta determinan la interpretación de los análisis. |
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México se enfoca en hacer crecer su industria del arándano La industria mexicana del arándano se encuentra consolidada y enfocada en avanzar en la elevación de la calidad en todos los niveles que están vinculados al cultivo y sus variantes. Según datos oficiales, la producción de arándanos en la temporada 2015/2016 pasó de 15.000 a 29.000 toneladas, en la campaña 2017 alcanzó las 37.000 toneladas, en la 2018 llegó a las 40.000 toneladas, luego subió a 49.000 toneladas en la 2019 y más de 50.000 toneladas. en 2020, manteniendo la tendencia alcista permanente. La industria mexicana es líder en muchos aspectos del cultivo a nivel mundial, entre otros, es pionera en producir arándanos en clima tropical, lo cual ha sido un aporte a la investigación, la ciencia y el conocimiento respecto al cultivo, y se observa con gran interés.
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Científicos estudian conexión entre Clostridioides difficile y patatas El papel de los alimentos en las cadenas de transmisión de Clostridioides difficile aún debe aclararse. La infección por Clostridioides difficile (CDI) es una causa notable de diarrea infecciosa en todo el mundo. La transmisión de persona a persona juega un papel importante, pero se están investigando otras fuentes y rutas de infección. Clostridioides difficile se ha aislado de varios alimentos y los expertos creen que es factible que algunos de ellos puedan ser vectores importantes para su diseminación generalizada. La evidencia existente sugiere que las papas, que representan un importante alimento básico consumido en todo el mundo, podrían contribuir a la propagación de Clostridioides difficile. Tienen las tasas de contaminación más altas entre los vegetales probados hasta la fecha. Aún no se han descrito casos confirmados de ICD asociada a alimentos. He ahí la importancia de la inocuidad de los alimentos y realizar análisis constantes en dicha materia.
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