Mediante numerosas investigaciones se ha demostrado que en las plantas existen relaciones definidas entre determinados nutrientes. La importancia del estudio de estas relaciones es lograr una mejor calidad en la nutrición de las plantas, ya que estas influyen significativamente en el desarrollo y producción de los cultivos. El exceso de un nutriente, la falta de otro o la presencia de los dos factores al mismo tiempo hace que el balance se rompa y en consecuencia se perjudiquen el desarrollo y los rendimientos potenciales de los diferentes cultivos. Una de las relaciones más estudiadas es el caso del fósforo con el zinc.