Estas soluciones pueden utilizarse en todos los sistemas de producción, desde aplicaciones en suelo, a campo abierto o en invernadero, mediante la técnica conocida como fertirriego; hasta sistemas de producción sin suelo (hidroponia), donde las raíces de las plantas son ubicadas directamente dentro de la solución nutritiva, o bien, la solución nutritiva es asperjada sobre éstas (areoponia). A temperaturas menores que 22 ºC, este oxí­geno disuelto es suficiente para abastecer la demanda de la planta (Figura1); sin embargo, el requerimiento es pequeño debido la reducción de la velocidad de varios procesos fisiológicos (respiración, etc.), disminuyendo con ello la absorción de nutrimentos y, por ende, el crecimiento de la planta.