La reacción del suelo, específicamente el pH es un factor del suelo que influye fuertemente en la asimilación de los nutrientes por las plantas, teniendo el rango de pH entre 6.0 – 6.5, como el más idóneo para mantener una adecuada disponibilidad de la mayoría de los macronutrientes y micronutrientes. Los valores de pH elevados normalmente afectan la disponibilidad de micronutrientes, así como el fósforo al formar complejos de baja solubilidad con el calcio y magnesio presentes en el agua.