Imagen: Los metales pesados afectan la fertilidad del suelo
Los metales pesados son elementos
químicos altamente dañinos que
contaminan el aire, el agua, el suelo y las
plantas cuando se absorben en altas
concentraciones o se depositan en el
suelo. Por una parte, la composición
química de la roca madre y los procesos de
meteorización condicionan, de forma
natural, la presencia de diferentes metales
pesados en los suelos, pero también las
actividades antropogénicas contribuyen
con este fenómeno, ya que muchos
metales pesados que han contaminado los
suelos provienen de actividades industriales, mineras y agrícolas, así como de residuos
sólidos urbanos.