Los metales pesados tienen dos tipos de origen; origen geogénico cuando provienen de las rocas que
dieron origen al suelo y los cuales fueron liberados por la meteorización de estas rocas; y origen
antropogénico, cuando son liberados por las actividades del hombre como la agricultura, ganadería,
minería, generación de energía eléctrica, actividades industriales y de construcción, etc. (Ver Figura 1). La
toxicidad de un elemento o compuesto químico es la capacidad que tiene ese material de afectar
adversamente alguna función biológica de cualquier organismo vivo.