Para las bacterias fijadoras de nitrógeno, el molibdeno es un elemento fundamental, ya que todos los sistemas biológicos de fijación de nitrógeno requieren enzimas que contienen molibdeno en su estructura. De esta manera es como el molibdeno es un elemento clave en el metabolismo del nitrógeno, pero también cumple otras funciones como: síntesis de ácido ascórbico, disponibilidad de hierro, y tiene un efecto benéfico cuando los niveles de cobre, boro, cobalto, manganeso y zinc son demasiados altos.